Hay un rincón donde a veces nos deplazábamos para pasar un dia de verano en contacto con la naturaleza, y disfrutar de la misma.
En las riberas del rio Bidasoa, cerca de Lesaka, se forma un pequeño meandro, donde las aguas bajan calmadas,y se forma una especie de playita de cantos pequeños y redondeados, y es el sitio ideal para darse unos chapuzones, y pasar la jornada entre árboles, sol, sombra,y agua fresquita.
Uno de esos dias, al llegar,vemos que en la pequeña cala se paséa de orilla, a orilla,con aire majestuoso el ave acuática mas bella que yó jamás he visto en su medio.
Nos quedamos fascinados viendo sus evoluciónes y su porte.No era un pato, ni tampoco un cisne,..su tamaño y sus colóres me dejaron atónito.
El ánade en cuestion seguía con sus evoluciónes a diez metros mas o menos de donde nos encontrábamos,y a mí me salió esa vena de ornitólogo un poco depredador, y me dije.-Si me zambullo y me sumerjo unos metros quizás pueda cojerlo por sus záncos y pueda llevarlo a un taxidermista para disecarlo y disfrutarlo como trofeo.
Por dos veces me sumergi, y por tántas veces fallé en el intento,y el ánade cuando yó asomaba la cabeza para coger aire, me mirába...y como a metro y medio mío movía su preciosa cabeza de un lado para ótro como burlándose de mi torpeza.
Me acerqué a la otra orilla, y pensé.-Si le asústo con alguna piedra puede ser que se acerque a tierra,..y allí pueda capturarlo.
A la primera piedra se acerco un poco a la orilla,pero la segunda fué a parar a su hermoso plumaje, y el ave en cuestión quiso levantar el vuelo, pero yó no sé si fué por el impacto recibido,o porque le habían disparado anteriormente nó pudo porque tenía un ala dañada, y sólo se elevaba un par de metros, y volvía al agua bastante maltrecho.
Un poco con pena, y otro poco como justificándome seguí acosando al pobre animal, y por fin salió a tierra en la ótra orilla donde Marian estaba cuidando a nuestra hija Patricia.
Nadé hasta la otra orilla y allí estaba entre los matorrales el ave que en tierra firme era torpe como un pato. Al acercarme para atraparlo,el pobre bicho quizás por instinto de conservación comenzó a lanzarme unos picotazos que más que un ánade parecía un buitre leonado.
Que Dios me perdone, y la Sociedada Ornitológica Aranzadi me disculpe, pero al final el precióso animal terminó en un gran capazo de playa a la espera de su destino.
A la vuelta de la jornada nos reunimos con mi familia, y mi hermano Julio no daba crédito a lo que veían sus hojos.¡¡Es maravillóso!!..¡qué plumáje!....¡qué cabeza tan real!...
Y tan "Real" que éra, porque se tratába de un <Anade Real>, especie muy apreciada y parece ser que perdída por éstos pagos.
.-Ésto no puedes disecarlo,porque te arriesgas a una denuncia posterior.....-Bueno dijo mi padre, aquí tenemos cinco kilos de sabrósa carne que podemos comer toda la familia el fin de semana que viene,yó me encargo de asarlo , pero ántes hay que desplumarlo y ponerlo "al sereno" para que la carne esté tierna.
A la semana siguiente fuímos a casa de mi hermano para cenar el "pavo", y al abrirnos la puerta se percibía un cierto "tufillo" a carne asada, pero el "tufillo" en cuestión no era precisamente apetitoso.
Mi cuñada Maite había preparado unas sabrosas ensaladas para acompañar el asado,.....oler, olía mal, pero después de trinchar el "pavo relleno" y probarlo.....todos dijimos que"aquello" sabía a rayos podridos.
Mi padre había dejado al sereno el ave con higado y todo con la mejor intencion culinaria,...pero al final terminamos cenando unos "arrai-txikis" que había pescado mi hermano.
El pobre "Ánade Real" terminó en el cubo de la basura,y en conciencia yó.........
¡¡¡ TENGO EL INFIERNO GANADO.!!!
J.J.G.TEIRA
6-9-2009
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